La negación, el enojo, la irresponsabilidad, no te mejorará.

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 Escrito para Fitness por Ana Cecilia Becerril

 Algunas personas no creen que tienen diabetes y no consideran necesario seguir un programa de cuidado de la diabetes; otras saben que tienen diabetes, pero aún así no se cuidan. Estas son formas de negación.

Puede llevar un tiempo sobreponerse a la negación, pero entre más rápido se acepte el diagnóstico y se comience a aprender acerca de la diabetes, será más pronto que se podrá tener independencia y lograr buena salud bajo un plan de cuidados.

La mayoría de las personas al ser diagnosticadas, experimentan enojo. Es perfectamente normal sentirse de esta forma a veces, pero no vas a poder ayudarte si te mantienes enojad@ y hóstil todo el tiempo.

Trata de hablar con miembros de tu familia, amigos u otras personas con diabetes para lograr exteriorizar esos sentimientos. Además, considera canalizar la energía que utilizas en estar enojado en hacer algo positivo como trabajar como voluntario o juntando fondos para organizaciones dedicadas a la diabetes.

Puede ser que estés buscando la causa por la que tienes diabetes y tengas sentimientos de culpa. ¿Habrán sido los dulces que comí? ¿Serán esas abundantes cenas? ¿Estaré pagando las consecuencias de algo malo que he hecho? ¡No! Ninguna de esas cosas causan la diabetes. Si lo hicieran, casi todo el mundo la padecería.

La depresión puede ser un problema serio para las personas con diabetes. Síntomas de depresión incluyen sentimientos de soledad, desahucio, falta de autoestima, fatiga, irritabilidad y cambios en el patrón de sueño o hábitos alimenticios.

Muchas personas con diabetes pasan por una etapa de duelo. Es normal sufrir por la pérdida de su estado saludable cuando usted ha sido recién diagnosticado con diabetes, o cuando aparece una complicación.

Una de las cosas más difíciles de enfrentar es el hecho de saber que aunque sigas fielmente tu plan de cuidados de la diabetes, puede ser que nunca logres un perfecto control. No hay garantía que seguir un buen régimen te mantendrá sano para siempre. Si esto es así, ¿por qué molestarse? Porque el hecho de esforzarse para lograr un buen control te hará sentir mejor física y emocionalmente.

Te sentirás mejor sabiendo que estás haciendo todo lo que está a tu alcance para permanecer sano. Y la única forma de reducir el riesgo de complicaciones es a través de mantener la diabetes controlada.

Desarrollando tu propia estrategia para enfrentar la diabetes

¿Cómo te sientes con respecto al hecho de que tiene diabetes? ¿Lo ves como un desafío diario, que necesitas fuerza, energía y atención así como el apoyo de tu familia y amigos? Si es así, estás enfrentando bien tu desafío. Entiende que la diabetes es una condición seria, pero a la vez, te sientes optimista con respecto a tu plan de tratamiento. Estás dedicado a tomar responsabilidad por tu propio cuidado, a seguir tu régimen, y a aprender lo más que puedas acerca de la diabetes. Confías en el grupo médico que te atiende, y si te sientes libre de participar en la toma de decisiones sobre tu tratamiento, tu actitud es positiva.

Por el otro lado, no estás manejando bien la situación si crees que la diabetes no es una condición seria, o que tu plan de cuidado es imposible de seguir, o que el tratamiento no funcionará. Puede ser que sientas que es la responsabilidad de tu médico el mantenerte saludable, que no puedes cambiar tu estilo de vida para poder seguir un régimen, que no tienes tiempo para ir a las citas con el médico, o que no quieres depender de tu familia o amigos para mantenerte apoyado. Todas estas situaciones indican que no has logrado adaptarte a tu diagnóstico.

Si sientes que no estás logrando aceptar la enfermedad, pregúntate porqué no puedes lograrlo. ¿Crees, por ejemplo, que no eres lo suficientemente fuerte, inteligente o educado para tomar responsabilidades por tu cuidado? ¿Tienes miedo de que los elementos necesarios para controlar la diabetes sean muy caros y no puedas conseguirlos?

El primer paso es buscar ayuda de profesionales en los cuales confiar y con los cuales puedes trabajar en grupo.

Implica valor y esperanza el hecho de tomar parte de tu propio cuidado, pero vale la pena.

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