Es importante cuidar la cantidad y calidad de alimento que se ingiere.

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Escrito para Fitness por Montserrat Atisgárraga Serra

Así como la edad la medimos en años o meses y nuestro peso en kilos o gramos, la energía que ingerimos o que gastamos se mide en calorías, de hecho, la forma correcta del término son kilocalorías.

Las kilocalorías no engordan ni adelgazan es simplemente una unidad de medición, lo que nos hace bajar o subir de peso es la cantidad total de kilocalorías que ingerimos diariamente por parte de la dieta, si la ingesta es mayor al gasto, se provocará un aumento de peso. Sin embargo, si la ingesta es menor al gasto se perderá peso, lo cual pasa cuando hacemos dietas bajas en kilocalorías.

Obviamente, aunque todos los alimentos nos provén de energía, esta se metaboliza diferente dependiendo si viene por parte de los hidratos de carbono, de las proteínas o de las grasas. Se han realizado estudios donde se ha demostrado que la energía por parte de las grasas se almacena más fácil que la de las otras dos fuentes.

Sugerencias para no caer en el exceso

• Lo ideal es no consumir mayor cantidad de energía de la que se gaste a excepción que se esté buscando subir de peso (fisicoculturistas), o exista alguna necesidad clínica específica (persona quemada).
• Consumir una dieta balanceada: 60% hidratos de carbono, 25% grasas y 15% proteínas
• Realizar una actividad física para evitar los depósitos de grasa en exceso
• Tener buenos hábitos alimenticios
• Tomar por lo menos 8 vasos de agua al día
• Evitar preparaciones fritas, capeadas o empanizados, ya que esto aumenta las calorías del alimento pudiendo caer en excesos rápidamente sin necesidad de consumir mucho volumen.

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